Queridas amigas y amigos,
¡Saludos desde el Secretariado Internacional de GAATW!
El 2020 ha finalmente llegado a su fin y ¡qué año ha sido! Todas y todos hemos sentido confusión, miedo, estrés y preocupaciones como nunca antes. No ha sido posible llevar a cabo nuestro trabajo tal como había sido planificado y hemos tenido dificultades para adaptarlo a la situación cambiante. No solo ha sido difícil o imposible viajar internacionalmente, sino que nos ha tocado estar confinadas en nuestras casas por semanas e incluso meses. Nuestra comunicación con miembros de la familia, amigas, amigos y colegas en otros países se ha visto mediada por la tecnología. Trabajar desde casa o de manera remota desde otros países se ha vuelto una necesidad. Y en un esfuerzo por dar sentido a las cosas, aprender de otras y otros colegas y compartir nuestros pensamientos con ellas y ellos, hemos tratado de acomodar múltiples zonas horarias y organizar muchas sesiones online. Estas sesiones funcionaron hasta cierto punto, pero también nos dejaron con una extrema fatiga de Zoom al final del año.
En la otra cara del espectro del trabajo, millones de trabajadoras y trabajadores han perdido sus trabajos y no saben cuándo volverán a encontrar empleo. El apoyo por parte de los gobiernos ha sido altamente inadecuado, y con frecuencia excluyó a las y los trabajadores migrantes e informales.